Diabetes
La diabetes es una enfermedad crónica e irreversible del metabolismo en la que se produce un exceso de glucosa o azúcar en la sangre y en la orina; es debida a una disminución de la secreción de la hormona insulina o a una deficiencia de su acción.
Se encuentran diferentes tipos de diabetes:
El médico puede utilizar las siguientes pruebas para diagnosticar la diabetes:
Glucosa en ayunas, Glicemia pre y post, curva de tolerancia, test de O’Sullivan. En el área de hospitalización y urgencias la más comúnmente usada es la glucometría, por tener un tiempo mínimo de respuesta.
El examen de glucometría se practica a las personas que requieran determinar el valor de la glucosa en sangre, especialmente para seguimiento en aquellas que tengan principalmente diagnóstico de Diabetes Mellitus, diabetes gestacional en mujeres embarazadas o estados de hipoglicemia en recién nacido de acuerdo con indicaciones médicas. El monitoreo permanente de glicemia también es muy importante en pacientes críticos y debe hacerse con el objetivo de implementar el manejo oportuno del mismo e identificar tempranamente alguna anormalidad en los niveles de glucosa en relación con el estado patológico o con el tratamiento instaurado.
La glucometría como herramienta del cuidado cercano al paciente (Point of Care – POCT) ha mejorado la disponibilidad de resultados en pacientes de cuidado crítico, sin embargo es importante tener en cuenta el uso de dispositivos que cumplan con las siguientes consideraciones: utilizar escaso volumen de muestra sanguínea para el análisis, alta precisión y fiabilidad, tiempo de detección corto y ausencia de interferencia con el hematocrito, bilirrubina o la presión parcial alta/baja de oxígeno, la urea, los fármacos, la maltosa y la galactosa. Ser de fácil manejo, con buena reproducibilidad sin calibraciones, opción de manejo de controles y trazabilidad de resultados. Es importante tener en cuenta que el medidor este avalado por agencias de control de medicamentos y dispositivos médicos a nivel nacional e internacional. (1)
Por ejemplo algunos estudios en pacientes en UCI por Infección con Covid-19 indican que la mortalidad fue significativamente mayor en pacientes con hiperglucemia aguda sin Diabetes Mellitus que en los pacientes con Diabetes Mellitus conocida (41.7% vs 14.8%;p<0.001); igualmente, la estancia hospitalaria fue significativamente mayor en el grupo de hiperglucemia aguda vs el grupo de Diabetes Mellitus (6,2 vs 5 días; p <0.001),(2) por eso la importancia de estar monitoreando la glucosa, debe realizarse glucometría antes de cada comida principal —preferiblemente cuando esta sea servida o máximo 1 hora antes— y antes de dormir Si el paciente está recibiendo nutrición parenteral, se recomienda realizar glucometrías cada 4 a 6 horas, o más frecuente si se encuentra con infusión continua de insulina, para así titular la dosis y evitar las hipoglucemias. Las metas en el paciente hospitalizado son valores <140 mg/dL pre-prandial y <180 mg/dL al azar. Una glucometría <100 mg/dL debe ser una alerta para buscar que puede estar pasando con el paciente (medicamentos, ayuno, pobre ingesta, dosis inadecuada. Si las glucometrías son <70 mg/dL, deben considerarse las condiciones antes descritas y disminuir la dosis de insulina para evitar eventos adversos serios. En conclusión, si se tiene un dispositivo de medición adecuado, un protocolo claro de inicio de de la terapia y un correcto monitoreo se puede llegar a desenlaces satisfactorios en pacientes de cuidado crítico y aumentar índices positivos en cuanto a seguridad del paciente. (3)
Vélez Lab pensando en la importancia que tiene la medición de Glucometría en cuidado crítico y cercano al paciente, pone a disposición los medidores NOVA StatStrip para resultados de glicemia que permita efectuar una adecuada correlación clínica y prescribir una terapia efectiva al paciente crítico mejorando los tiempos de respuesta. Es importante tener en cuenta que Nova StatStrip es el único medidor aprobado por la FDA en Estados Unidos para uso en el entorno hospitalario con muestras arteriales, venosas y capilares sin interferencias clínicas significativas conocidas. Estos hechos han sido verificados en más de 8000 medicamentos y a través de 168 estudios independientes realizados a lo largo de ocho años incluidos 53 estudios en unidades de cuidados intensivos y adicionales a los presentados a FDA.